En el mismo espíritu del blog de Matt Might, he decidido comenzar a escribir pensando en mis alumnos. Mis discípulos, si se puede decir así. Porque más que un profesor uno es un mentor. Uno les enseña el camino y los acompaña, a veces los empuja y otras avanza y espera a que lo alcancen.
Dejarles mis reflexiones sobre la vida académica y profesional. Consejos sobre cómo salir adelante y aprovechar las oportunidades. Y bueno, consejos prácticos que nunca sobran.